Las tres leyes que gobiernan el ahorro en la economía familiar son: Orden, Descuentos y Cosas gratis. Aprende a aprovecharlas y cuida la economía familiar.
Orden
Lo más importante de todo es tener un orden para saber en qué se gasta el dinero cada quincena y cada mes, anotando en una libreta cada gasto y la cantidad que requiere.
También hay que identificar entre los tipos de gasto:
Fijos. Son los pagos que se realizan sin falta cada cierto tiempo y que no pueden obviarse. La renta del departamento y el pago de servicios, son gastos fijos.
- Variables. No se pueden controlar con exactitud pero tampoco podemos evitarlos. Transporte, alimentación, ropa, etcétera.
- Prescindibles. Son gastos que no son necesarios y que pueden dejarse para otro momento o que se pueden evitar, como los relacionados al ocio y los caprichos.
Elabora un presupuesto mensual, anota cada gasto fijo y un aproximado de cada gasto variable; separa esa cantidad, no la toques. El resto, guárdalo o úsalo con sabiduría.
Descuentos
En los gastos variables (difícilmente los fijos), puedes encontrar ofertas que vale la pena aprovechar. Si un gasto variable incluye jamón, por ejemplo, compra la variedad que tenga descuento.
Cada pequeña oferta que te ahorre uno o dos pesos, sumarán para un ahorro importante cada mes.
Cosas gratis
Si tu proveedor de internet te regala algún servicio de streaming (series o películas en línea), aprovéchala. En vez de comprar un DVD o hacer una visita al cine, vean una película en familia sin que les cueste un peso extra. Las opciones son limitadas, pero si buscas, seguro encontrarás algo divertido.
Usa los servicios de música en línea gratis. Los anuncios son molestos, pero ¿recuerdas cuando la música las escuchábamos por la radio? Los anuncios eran inevitables, pero los soportábamos.
En las bibliotecas públicas cada vez hay más cosas que sólo libros. En vez de comprar un libro, un CD, un DVD o un cómic, sácalo de la biblioteca. Aprende a disfrutar las cosas gratis que nos ofrecen nuestras instituciones.
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