Diversión, ejercicio y salud son las cosas con que asociamos los deportes, pero nos olvidamos de algo igualmente importante: puede ayudar a fomentar los valores en los niños.
Trabajo en equipo. Los deportes de equipo ayudan a que tu hijo establezca relaciones con sus compañeros, para trabajar juntos en busca de cumplir un objetivo compartido (ganar de forma general, o anotar un punto de forma más particular). Se refuerza la empatía y la colaboración, reconociendo y respetando las diferencias, virtudes y debilidades de los demás y propias. El niño aprenderá que el grupo es más importante que el individuo.
Esfuerzo y dedicación. Aprenderá que al practicar constantemente y luchar por mejorar, es un excelente hábito para todos los aspectos de su vida.
Respeto. Aprenderá a respetar al rival y al compañero por igual, reconocerá el deseo de victoria de su oponente tanto como el propio y entenderá que no todo se debe tomar de forma personal.
Responsabilidad. Entenderá que si él falla, compromete el esfuerzo del grupo entero, y se dará cuenta de que tiene una responsabilidad colectiva que va más allá de él mismo. Así será más responsable en su vida y su relación con el mundo que lo rodea, tanto con otras personas como con la naturaleza.
El deporte es una actividad excelente para los niños de casi todas las edades, ayuda a tu hijo a descubrir cuál es el que va consigo.
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