Desde los 3 años de edad, un niños está listo para practicar artes marciales, y existen clases para cada edad y etapa del niño, así que si lo has considerado para tu peque, ¡anímate! Tiene muchos beneficios.
Salud física y emocional
Las disciplinas marciales les ayudan a desarrollar sus habilidades motrices y aprender reglas de conducta. Las personas que practican artes marciales tienen, en general, una vida más saludable y son personas con capacidades sociales más positivas. ¿Recuerdas las películas de Karate Kid? Pues las artes marciales orientales desarrollan el cuerpo y la mente (o espíritu, si lo prefieres).
Físicamente, los músculos se estiran, el sistema cardiovascular trabaja, la destreza aumenta y se evita la atrofia.
Psicológicamente, se adquiere el valor del respeto y la responsabilidad, pues el objetivo no es lastimar sino crecer personalmente.
Física y mentalmente, se adquieren hábitos y disciplina que permiten a sus practicantes ser también responsables en todos los ámbitos de su vida.
Si has considerado una actividad física para tu hijo, las artes marciales podrían ser la mejor opción.
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