Hay diferentes formas de cultivarte, pues el concepto de cultura abarca distintas áreas. Las principales de ellas, y que debes desarrollar de acuerdo a tus propios intereses, son:
Cultura intelectual. Se trata del gusto por el conocimiento y el enriquecimiento cultural. Una de sus facetas es el mantenerte informada sobre lo que sucede en el mundo y las distintas formas de ser humano en él. Puedes acceder a esta forma de cultura mediante libros, principalmente, pero también a través del radio, la televisión, la prensa, los eventos artísticos, el cine, etcétera.
Cultura emocional. Es acerca del equilibrio personal y la salud mental, mantener una actitud constructiva y aprender a manejar las emociones de forma positiva.
Cultura de ocio. El aprovechamiento del tiempo libre. Es tiempo libre, o sea que lo debes usar con libertad, no cederlo ni comprometerlo. Si te gustan los bailes o descansar en casa, es tu tiempo.
Cultura laboral. Se trata de huir de la rutina en el trabajo y ser capaces de disfrutarlo o de evitar que se convierta en un peso no deseado. También se trata de crecer profesionalmente, aprovechar las oportunidades y buscar las mejores opciones.
Más cultura
Una mayor cultura en todos estos ámbitos, te hará una persona más equilibrada y rica, tu concepción del mundo se verá favorecida y será más difícil que te quieran o puedan tomar el pelo o engañar, tampoco será probable que caigas en demasiadas trampas y serás más hábil para enfrentar las adversidades, cualquiera que sea su origen.
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